El comercio electrónico o e-commerce, llegó para quedarse. Hoy en día incluso existen varios tipos de comercio virtual con diferentes plataformas y medios para llevarlos a cabo. Esto no solo ha cambiado las «reglas del juego» sino que ha planteado modelos totalmente diferentes para la adquisición de bienes y servicios.
Por otra parte, estos e-commerce ya no solo se orientan al consumidor final. Sino que, por ejemplo, se crean para satisfacer necesidades de negocios o para mejorar la comunicación interna de una empresa.
¿Qué es E-Commerce?
Se puede definir el comercio electrónico como la adquisición de bienes y servicios a través de los canales virtuales de internet en general. Esta definición puede ser un tanto generalista. Esto es porque este tipo de comercio ha crecido y diversificado tanto que una definición muy concreta para un modelo puede quedarse limitada.Además, esta revolución digital ha llegado a la mayoría de sectores y se ha adaptado a ellos de formas diferentes.
El e-commerce no queda limitado a las tiendas virtuales donde los usuarios entran y compran productos, lo que sería uno de los sistemas más «clásicos».
Va más allá, incluso con modelos que sólo podrían existir gracias a estas nuevas tecnologías, como por ejemplo «los memberships» donde un cliente acepta un pago recurrente a cambio de servicios digitales como por ejemplo, la formación online.
Así, el comercio electrónico abarca todas las actividades comerciales que impliquen los canales y las tecnologías virtuales.
6 Ventajas del Comercio electrónico por las que deberías montar un e-commerce
Como puedes imaginar, el comercio electrónico ofrece muchas ventajas frente al modelo tradicional de consumo. No solo de cara al empresario, también de cara al propio consumidor. Hoy más que nunca es más fácil crear un negocio online en forma de e-commerce:
1 – Facilidad para el diseño y funcionalidades:
Hasta la llegada de los CMS, necesitabas sí o sí, contar con la figura del programador o contar con algún informático que supiese programar sistemas seguros para vender por internet. Por no contar también con alguien que entendiera de diseño y a la vez de HTML, CSS y Javascript. Hoy por hoy, solamente necesitas un gestor de contenidos y emplear varias horas de tu tiempo para poder montar una tienda online tú mismo desde cero.
Además, podrás cambiar tu diseño para que esté a tu gusto las veces que quieras y en un tiempo más que razonable, le habrás dado otra «imagen» a tu tienda…
Si tu tienda fuese solo física no te plantearías estos cambios, o ¿estarías dispuesto a cerrar, pintar, comprar mobiliario, hacer obras… cada vez que se te encaprichase algún cambio de imagen?. Con las tiendas virtuales lo puedes hacer
2 -Disponibilidad:
Tu tienda virtual no tiene horarios. Está abierta y disponible 24 horas al día, 7 días a la semana y 365 días al año. Algo insuperable para cualquier negocio con venta exclusiva a través de local físico.
3 – Alcance:
Cualquier cliente o usuario con conexión a internet puede acceder a tu tienda y comprar en ella. Es decir, si preparas tu web para varios idiomas y países, podrás vender de forma efectiva a la mayoría de países de todo el mundo.
4 – Automatización:
Tu tienda online vende sola, no necesitas estar físicamente para atender la venta de tus productos, si bien es cierto que deberás resolver dudas o algunos trámites como las devoluciones etc (de eso aún no se ha librado nadie…) pero hay que hacerlo para dar un servicio profesional a los consumidores y, entre otras cosas, para cumplir la ley, claro está.
También existen campañas de marketing automáticas para comunicarte con diferentes tipos de clientes: los que te han comprado, los que no etc. así que imagínate las posibilidades
5 – Costes más reducidos:
Al no tener que responder por un local físico, los costes se reducen considerablemente, también por el hecho de que no necesitarás trabajadores al uso en la propia tienda, más bien necesitarás a algún profesional concreto que te ayude a mejorar aspectos de tu sitio web o una agencia de marketing digital que pueda ayudarte según tus necesidades. Lo cierto es que «montar la tienda» no es el paso más difícil.
Lo difícil es que los usuarios lleguen a tu tienda y estén encantados de haberte comprado y con ganas de hacerlo de nuevo
6 – Información muy valiosa:
Una de las mejores ventajas que ha traído la digitalización de los negocios, es la capacidad para obtener información muy valiosa de tus usuarios o clientes potenciales. En un e-commerce, se puede medir prácticamente todo y obtener todo tipo de información acerca de tus usuarios:
Por ejemplo:
Puedes saber cuánto han comprado un producto concreto, desde dónde, el rango de edad de esos usuarios, si vienen desde dispositivos moviles o pc…Y no solo eso, sino que puede preparar campañas publicitarias dirigidas a ese tipo de usuarios. ¿No es lógico que compren también aquellos usuarios a lo que les llega tu publicidad?
Opciones para crear una tienda online
Gracias a los CMS, no necesitarás contratar a un diseñador web o tener conocimientos de programación. Basta con instalar el gestor de contenidos que más se adapte a tu idea de negocio e ir aprendiendo a través de la plataforma a dar forma a tu sitio web. Puedes encontrar diferentes CMS:
– E-Commerce con WordPress:
Es el más empleado de todos. Su manejo es muy intuitivo y fácil en comparación con otros CMS. Se puede emplear tanto para páginas corporativas, de blog como para tiendas online. Para esto último es más que aconsejable instalar el plugin «Woocommerce«. Que es precisamente la extensión que te va a permitir crear una «tienda virtual» en tu sitio wordpress.
Al rededor de un tercio de las webs del mundo, están creadas con WordPress
– E- Commerce con Joomla:
Joomla es otro CMS también muy utilizado para la creación de sitios web. Su manejo puede ser más complejo que wordpress ya que tiene otra forma de maquetar e implementar funcionalidades. Sin embargo, es uno de los CMS más potentes y seguros. La capacidad de edición y configuración hacen de este CMS uno de los más personalizables.
– Prestashop:
Prestashop es la joya de las tiendas online. Este CMS se coloca indiscutiblemente como el más potente para la creación de una tienda online. Es la opción más recomendada sobre todo si vas a vender a varios países y tienes un buen volumen de productos y combinaciones disponibles. Por otra parte, la plataforma en sí es una de las más complejas para la maquetación o diseño de tu sitio. Por lo que te recomendamos que si tomas esta opción, tengas algo de experiencia con CMS.
– Shopify:
Esta es uno de los CMS más famosos de los últimos años. Shopify es el más empleado para los e commerce del tipo Dropshipping. Al estar relativamente orientado a este tipo de comercio electrónico tiene varias extensiones para facilitarte su desarrollo.
En sí, es uno de los cms más simples y rápidos de manejar. Esta es una de sus principales puntos de valor ya que en escasas 2 horas puedes montar tu tienda online y comenzar a vender.
– Magento:
Este es un CMS de código abierto, es decir, cualquiera puede acceder a su código fuente y editarlo a medida para su proyecto. Es completamente personalizable y podrás tener el control total de los diferentes canales de venta que practiques.
– Drupal:
Este es otro CMS de código abierto. Sus últimas versiones está compitiendo directamente con wordpress y prestashop. Su modelo programático es más potente y permite una gran personalización y maleabilidad para diferentes tipos de proyectos virtuales. Una gran opción si quieres un desarrollo muy profesional y tienes ya algo de experiencia con los cms.
4 Tipos de E-commerce
Existen numerosas y muy distintas maneras de crear un e-commerce. En función de tus objetivos y tu actividad comercial, podrás encontrar un modelo de comercio virtual que se adapte a ti.
– Comercio electrónico B2B:
Estos tipos de e-commerce están conformados por empresas que centran su actividad económica en proporcionar bienes y/o servicios a otras empresas (Business to Business). Se suele dar mucho en el comercio al por mayor para otros distribuidores. Uno de los que más se asemeja al modelo tradicional de la venta al por mayor para otras empresas que venden al consumidor final.
– Comercio electrónico B2C:
Estos E-commerce, se componen de empresas que venden productos y servicios al consumidor final o clientes finales (Business to Client). Es el que más se asemeja al modelo tradicional que prevalecía hasta nuestros días. Desde una empresa se ofrecen productos y servicios al consumidor final.
– Comercio electrónico B2E:
Este tipo de comercio electrónico es uno de los más novedosos. Se refiere a los productos y ofertas que una empresa puede ofrecer a sus empleados (Business to employee).
Normalmente, se suele gestionar a través de accesos privados a las plataformas web de dichas empresas. En muchas ocasiones se adapta este modelo para mejorar la productividad de los trabajadores cuando pueden acceder a productos o servicios con ciertos privilegios.
– Comercio electrónico C2C:
Muy frecuentes para vender o gestionar la venta de productos usados, reacondicionados o de segunda mano. Es un modelo que ha tomado más renombre a través de internet. En estos sistemas de e-commerce, el consumidor adquiere bienes usados a otros consumidores a través de una plataforma de gestión. (Customer to Customer).
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